Tras la pista de...un lugar donde esconderme de Paula - Vol.4

Bueno, bueno, bueno...Mira que esta vez tenía pensado otro tipo de post totalmente distinto, pero ha sido echar un vistazo al blog de la "Olivia Palermo" de Candás y, una vez más, sintiéndome incapaz de reprimir mis impulsos más primarios, he optado por cambiar de planes y dedicárselo a ella, a nuestra Paula. 

No sé si es que lo mío es ya manía persecutoria o qué, pero lo de hoy -mejor dicho, lo de ayer- me parece como de coña. Para quienes no hayáis tenido la oportunidad de identificar la entrada de la que os hablo todavía, sabed que me refiero a esa en que nos presenta sus básicos de "sport wear", oh yeah. Sport wear, ropa deportiva o como lo queráis denominar, ya que con looks de ese tipo otras graban hasta video clips, pero bueno, ese es un tema aparte. 

A lo que voy es a que, posiblemente sin darse cuenta, finalmente Paula se ha delatado a sí misma y nos ha venido a aceptar ese gran secreto a voces que muchos conocíamos y que no es otro que el de que la ropa que presenta día a día es, en su mayor parte, la que le envían como regalo las marcas o las tiendas, lo cual me parece muy bien, no tengo nada en contra, pero demuestra que realmente tanto look Fetiche Suances y tanto bolso Cool the Sack no es casualidad sino más bien marketing.

Por poner un ejemplo, ¿alguien de verdad se cree que alguna de estas prendas ha sido estrenada? Andaaaaaa...

Para los más escépticos, la siguiente foto es todavía mejor. De hecho, me ha provocado una carcajada espontánea al verla...

¿¿En serio esta chica pensó que alguien en su sano juicio podía creer que estas zapatillas son las que usa para hacer deporte?? Pero si les falta que asome por dentro la típica bolsita con bolitas que te traen en la caja cuando las compras...por no hablar de los cordones que están blancos impolutos...¡¡si es que me vuelve a dar la risa!! Como dice la célebre frase de Brandon Walsh, "espabila Paula, Villafranca del Castillo no es el paraíso", ni tus seguidores se chupan el dedo -la segunda parte es de mi cosecha-.

De todos modos y por si esto no fuese suficiente, lo peor de todo es que la propia Paula ha repetido en varias ocasiones que el único ejercicio que hace es subirse a la plataforma vibratoria y para eso ya os digo yo que no hace falta tanto "sports wear", ni mucho menos llevar bolsitas como la que veis abajo, sobre todo porque, en su caso, el aparato se encuentra ubicada en el mismísimo dormitorio conyugal y, que yo sepa, dentro de su propia casa una no suele llevar bolso, ¿no?

Ayyyyyy, con lo bien que ibas últimamente, ya la has tenido que volver a liar...

Pero bueno, dicho esto, he de reconocer que no todo en el post es criticable. Al contrario, hay un detalle que me parece digno de elogio y es precisamente lo que voy a hacer ahora: ¿¿No os habéis dado cuenta de que el césped de los Bustamante Echevarría ya es verde y mullidito?? Si hasta me recuerda a Pedreña... ¡¡Tres hurras por Paula que, aunque menos de lo que debiera, sigue los consejos de CBN!! Me habéis alegrado el día. 

¡Smuacks!

Si cada español me diese una peseta - Vol. 4

Hola mis queridos y sufridos seguidores a la par que "amigos", esto último lo pongo entrecomillado porque entiendo que, de tanta falsa esperanza levantada con entregas que nunca terminan de ver la luz, cada vez me odiaréis más. En cualquier caso, espero que no llegue la sangre al river y ser capaz de recuperar vuestra confianza, ¿no lo consiguió Kiko Rivera con Jessi o al revés? Pues eso, que procuraré aplicarme.

En fin...no desviaré más la atención  -que ya me estoy yendo por las ramas-, y me centraré en el contenido del post que, dentro de su sección, introduce una nueva variante. Me explico: además de compartir con vosotros algunas piezas de la última colección de quien, hoy por hoy -expresión folclórica por excelencia de la que soy fan acérrima-,  es una de mis diseñadoras fetiche, introduciré a debate el fenómeno de los "clones" que, como sabéis, las grandes compañías de fast fashion no paran de comercializar, para alegría y júbilo de todo tipo de fashionistas y streetstylers y sobre los que personalmente no tengo claro qué pensar.

Pues bien, como ya os avancé hace un tiempo, la diseñadora que tanto me gusta es Mary Katrantzou, posiblemente una de las mayor talento y éxito del momento. Realmente todo lo que hace la griega esta me parece espectacular, no sólo por los cortes y patronajes de sus prendas -que son de quitar el sentido-, sino también o, mejor dicho, especialmente por sus estampados. Es precisamente en ellos, sus tintes y matices de color donde se percibe de forma clara la amplia experiencia como creadora de interiores de su autora.

¿No me digáis que este vestido no se merece un "ohhhhhhhhhhhhhhh"?

Aquí su "hermano" para mediometros, entre las que me incluyo, que también es ideal:

Por último, este otro conjunto -falda y top-, similar a la primera opción que os mostraba hace un rato, quizá algo más ponible y, eso sí, igualmente maravilloso:

Repámpanos, ¿a que todos ellos son como de ida de olla? Peeeero, como la felicidad completa no existe, hay un pequeño problemita relacionado con el número de furgones blindados que es necesario robar para poder llegar a contar con una de estas obras maestras en nuestro armario. Snif, snif, sí, efectivamente, se llaman más de dosmil cualquiera de las tres propuestas, lo cual las convierte en cuasi inaccesibles para la mayor parte de los mortales. De hecho, por eso están aquí, para ver si, de una vez por todas, empezáis a hacer los deberes y me regaláis alguno, que el jueves es mi santo...

Ya, ya sé que no he sido lo suficientemente buena últimamente como para andar con exigencias. Por eso, con todo el dolor de mi corazón, no insistiré y directamente pasaré a desarrollar la segunda parte del post que, como os decía al principio, versa sobre un fenómeno bastante común en la actualidad al que yo llamaría algo así como "el ataque de los clones". Su planteamiento me vino a la cabeza esta misma mañana mientras navegaba por la web de Blanco y me topé con el siguiente vestido: 

Ummmmm, sospechoso el parecido con las prendas que acabamos de ver, ¿no? ¡¡Si hasta parece que lo ha diseñado una tal Mary "Ka-katrantzou"!! 

Ay no sé, no sé qué pensar...por una parte supongo que está bien que cualquier niña, o cualquiera de nosotras, pueda ir a la última y monísima por 39,90€ pero, por otro lado, me resulta un poco excesivo que el Zara o Blanco de turno "fusilen" un patrón o estampado -como en este caso- sin ningún tipo de cuestionamiento ni problema legal. Y que conste que soy la primera que varias veces he sucumbido a la tentación de la copia, lo que ocurre es que tengo la impresión de que, éstas, cada vez son más numerosas y descaradas y por ahí ya no paso. Democratización de la moda SÍ, pero dentro de unos límites, ¿no les parece, señores? 

Vosotros, ¿qué pensáis?, ¿os gusta Mary Katrantzou tanto como a mí?, ¿sois fieles seguidores de las tendencias a base de "clones" cortesía de Don Amancio y compañía?

¡Abrazos mil!

Soy lo peor, lo sé y lo asumo. Paula vale mucho más como bloguera...

Hola a todos, antes que nada, quiero pediros mis más sinceras disculpas por no haber escrito en el blog desde hace ya bastante tiempo. Soy lo peor, qué queréis que os diga...parezco Vicky Martín Berrocal, pero de garrafón (eso sí, más delgada también, jeje). 

La verdad es que no he tenido excusa ninguna salvo haberme encontrado algo "dispersa" últimamente...astenia primaveral lo llaman algunos, tontería pura y dura prefiero considerarlo yo...

El problema es que hoy tampoco voy a poder explayarme mucho más porque, además de que los problemas domésticos me acechan (mi ducha RIP), estoy consternada y triste por esa noticia que nos llegaba desde el otro lado del Atlántico ayer mismo. Ha muerto Donna Summer -parece que mi ducha no ha sido el único deceso- y esto mina por completo mi inspiración. Así que, por el momento, os dejaré simplemente con el siguiente vídeo, mi canción favorita de la artista: Protection, con la que tan buenos momentos pasé en Roxy Club, Istanbul allá por el año 2003...poco más que decir. Bueno sí, que estoy en situación de prometer y prometo un post como Dios manda antes de que acabe la semana. Tenéis mi palabra que, al fin y al cabo, como buena folclórica -frustrada- me sigo debiendo a mi público.

Rendid tributo a Donna y bailad, bailad, bailad todo lo que podáis este finde...yo es lo que pienso hacer. 

¡Un abrazo!

Murcia, ¡qué bella eres!

Pues sí, la verdad es que tenía un montón de prejuicios sobre este lugar en el que me encuentro -Murcia- pero he de reconocer que, sin ser la playa del Sardinero, no está nada mal...

Organizan un festivalazo con sus hipsters, sus pinipones pisoteadas y demás lindezas cool, que para si lo quisiese Madrid. Y,lo que es más, musicalmente no tiene nada que envidiar a otros de referencia internacional como puede ser Coachella con el que este año ha llegado a compartir cabeza de cartel...still love u Jarvis!!

 

Además de todo esto, la oferta de ocio alrededor es, digamos que, notable. Desde las tapas que puedes tomar en la Plaza de Santa Catalina o de las Flores (petada de hipsters y murcianos a partes iguales, mezcla digna de estudio sociológico), hasta los copetes de la Plaza de la Catedral (que te hace sentir un poco en Roma, de verdad os lo digo), todo, todo, realmente merece la pena. Y sin el petardeo de otras ciudades, ya nos entendemos...

En serio...no sé si la cerveza rumana y los gintonics tendrán parte de culpa, pero ahora mismo me encuentro decidida a ir al banco el lunes mismo para ver si me dan crédito y comprarme la casa en Polaris World...porque adoro Murciuquis.

...Y es que, despué de mucho despotricar, al final voy a acabar aceptando lo que nos decían en los noventas Andoni Ferreño  y Arantxa del Sol..."Murcia, ¡qué bella eres!"

Quiero a Murcia, ¡¡¡pero a vosotros os quiero MÁS!!!

Siento no ser capaz de enseñaros ninguna foto -y de que la tabulación sea de garrafón total- pero es que, cuando estoy en computadora ajena, me vuelvo lela...